domingo, 20 de septiembre de 2009

Lo natural...


Esta imagen recoge lo artificial (la belleza de lo creado por los humanos: el puente, los edificios…) y lo natural (la belleza de la naturaleza: el río, las flores…)

… ¡¡¡hasta se puede sentir el perfume de las flores!!!


domingo, 6 de septiembre de 2009

Juzgados

La promesa.

Un joven, al estar con su novia en un parque, dentro de un auto, le
ruega, lloriquea y pide por lo que más quiera que se deje hacer el
amor, pero la chica no accede.

Finalmente el joven le dice:
- ¡Anda mujer! ¡Sólo te voy a meter la mitad! La mujer, por fin
convencida, acepta, diciéndole:
- Bueno, pero sólo la mitad... Promételo.
El joven acepta y se lanza sobre ella desesperado e introduce todo lo
que tiene. La chica, al sentir la embestida, goza tremendamente y le
dice a su novio:
- ¡¡Métemela toda!!... ¡¡Métemela toda!!
El novio, algo avergonzado, tratando de salvar su orgullo, le dice:
- ¡Ah No! Promesas, son promesas.

Testículos calientes

Tres amigas conversaban y una dijo:
-¡UY! ¡Cuando hago el amor con Juan, le toco los testículos y se le ponen calientes!
La otra dice:
- ¡UUUYYY! ¡Cuando yo hago el amor con Pedro, le toco los huevos y también se le calientan!

Y la tercera dice:
- ¡NO! Yo no me he dado cuenta, pero esta noche, cuando haga el amor con Jaime, me voy a fijar y les cuento.

Al otro día se juntan, y la mujer llega con un aspecto preocupante y las amigas le preguntan:
- ¿Pero qué diablos te pasó?
- Lo que pasa es que estaba haciendo el amor con Jaime, y me acordé de lo que habíamos hablado, así que le toqué los huevos y le dije:

- ¡UUYYYYYY! ¡¡¡SE TE CALIENTAN IGUAL QUE A JUAN Y A PEDRO!!!

La vida da vueltas...

Un empujoncito:

A las 3.00 A.M., suena el timbre de la casa; abre la puerta el dueño y
al abrir se encuentra con un completo desconocido y borracho
diciéndole:

-¿Señor, por favor, me haría el favor de empujarme un poco, que...?

El señor le interrumpe indignado:

-¿Pero como se atreve a tocar a mi puerta a las 3 AM? ¡Yo a usted ni
lo conozco y en tres horas me tengo que levantar para irme a trabajar.
Deje de molestarme y váyase de mi casa!

El borracho se disculpa y se va obediente y cabizbajo. El dueño
regresa a su cuarto, muy molesto; se queda insomne y empieza a sentir
un poco de remordimiento de conciencia y piensa:

"¿Y si me hubiera pasado a mi? ¿Si mi coche se quedara tirado en medio
de la madrugada y nadie me ayudara a empujarle? Debemos ayudar al
prójimo... sabe Dios lo lejos que estará de su casa... ¡Hay que ser
solidario!

Total, que decide salir a buscar al borracho. Abrió su puerta y ya no
había nadie, no vio más que el parque de enfrente medio a oscuras, y
decidió gritar:

- ¿Donde esta el que necesita que le empujeeeeeeee?

Y en eso se oye a lo lejos al borracho:

- ¡¡¡Aquiiiiiiiiiiiiiiiiii!!!... ¡En los columpioooossss!